El era un bastardo, su vida fue un infierno desde que nació; sus padres lo odiaban por ser la causa de su matrimonio. Pues su madre quedó embarazada de él a una edad temprana y sus abuelos forzaron a sus padres a casarse por el.
Su madre lo detestaba, Había pensado en 1000 maneras de cómo deshacerse de él antes de que naciera, Pero como eran de un país en el que el aborto era severamente ilegal, No tuvo más remedio que aceptar a ese "bastardo" de hijo que le toco tener, aunque no quisiera.
La madre del Tachi, solía torturarlo desde que se embarazo de el, Deseando que naciera muerto, su asco de tener un bastardo en el estómago era enorme. Y mientras ella se la pasaba aguantando su indeciado embarazo, su "pareja" Se la pasaba de mujer en mujer, Como si no tuvieras responsabilidades en la casa.
Cuando nació, apenas se acordaban de el, el niño no tenía idea de lo que pasaba a su alrededor, Siempre recibió rechazo por parte de sus padres, Tuvo que ingeniárselas desde pequeño para poder alimentarse y mantenerse bien, Constantemente su madre salía a divertirse por las noches, Acostándose con diferentes hombres, Mientras que su padre llegaba a la casa con varias mujeres, muchas veces estaba encerrado en su cuarto escuchando los ruidos de este y las risas de las mujeres que traía.
En las madrugadas, Para él era totalmente normal escuchar a sus padres pelear por cualquier cosa. Su madre gritando a los cuatro vientos la muerte de su padre, y este deseándole a ella desaparecer de su vida. Muchos harían la pregunta de por qué no se separaban, pues eso era porque las familias de estos, solían ayudarlos económicamente a ambos con la crianza del niño. Ni siquiera sabían si el niño iba a la escuela o lo llevaban a una clínica si se enfermaba, Todo el dinero se iba en los vicios de ambos, Y esa era la razón del porqué no se separaban, Y se la pasaban tolerando del otro de sus engaños o irresponsabilidades. Su padre apenas trabajaba y su madre se la pasaba más cuidando de ella y de sus uñas qué en vez de su propio hijo.
Cuándo sus abuelos venían a visitarlo, eran los peores momentos para el. Ya que su irresponsable madre lo obligaba a no decir ni una palabra de lo que el vivía en esa casa.
Aveces pasaba días sin comer, buscando algo que comer en las estanterías vacías o en la nevera llena de mugre o latas de cerveza.
A veces se abrazaba el estómago y lloraba en silencio por el hambre que tenía, en ocasiones se desmayaba por la falta de comida. En muchas ocasiones empezó a robar, del dinero de su padre, Sabía que cuando éste llegaba del trabajo guardaba el dinero en una parte especial donde su odiosa esposa no lo encontraría. Tomaba una pequeña cantidad cada que podía y salía a comprar comida. Escondiendo siempre la evidencia, cada que llegaba a casa.
En la escuela las cosas eran difíciles, Tantas reuniones de padres en las que sus padres no asistieron, Excusándolos con la Típica frase de siempre. "Están ocupados con el trabajo y no pueden venir" jamás tuvo amigos, nunca se atrevió a socializar con alguien por miedo a que descubrieran su vida en casa.
Cuando cumplió 11 años, empezó a trabajar como leñador, para crear carbón vegetal y venderlo, era un buen trabajo, Y como era un niño tenía un horario flexible para que no dejara de estudiar.
Jamás le dijo nada de esto a sus padres, pues Sabía que sus padres le quitarían su sueldo por su naturable avaricia, Tampoco mencionó nada de su Vida privada a sus abuelos o a sus maestros o jefes. Nunca quiso que nadie supiera lo que él vivía dentro de casa desdé qué nació.
En la escuela, jamás mencionó algo de su trabajo, pues Cuándo empezaba a traer dinero para comer, Un grupo de matones se percataba de la suma que traía, así que constantemente lo acosaban para quitarle su dinero, Y si él se negaba, eran horas de palizas sin fin, Hasta que este accedia y les daba el dinero.
En su casa, Cuándo su padre perdía una puesta, solía desquitarse con el todo el tiempo, ya fuera golpeandolo o dejándolo afuera de noche. Su madre no se quedaba atrás, si un hombre la dejaba, está le pegaba con un cable de cocina, ya qué Cuándo alguien le mencionaba alguna mantela que tenía mi esposo e hijo, estos la mandaban a volar. Pero que se podía esperar de una madre striper y prostituta, y de un padre borracho y mujeriego.
No contaba con nadie con el único que podía contar era con el mismo, Cada que lo miraban con algún moretón no herida decia que era porque jugaba con los niños de su colonia a las luchas y terminaba así o por que jugaba fútbol y era normal lastimarse.
A sus 14 años su vida iba cambiando, su madre se había quedado con otro hombre, que no era del todo diferente a su esposo. Y su padre vivía con una amante, lo malo de esto, era el padrastro que le toco. Solía tocarlo de vez en cuando y nunca dijo nada, porque sabía que su madre no le creería.
Este solo se alejaba y empezó a dormir en la calle por su culpa, Pero era mejor que estar en la misma casa de un hombre que lo tocaba a cada rato, a espaldas de su madre.
Cuando cumplió 16 años, su vida Parecía mejorar un poco, conoció a un chico llamado Noyat. No puedo evitar Luis enamoró de él, Para su sorpresa él había aceptado sus sentimientos e iniciaron una relación.
Tachi decidió Abandonar esa casa e irse a vivir con su pareja, No diría que fue la mejor opción de todas, pero era mucho mejor que vivir con su madre prostituta y su padrastro pedofilo. Tachi y Noyat se la pasaban genial, Era lo que decía tachi. Pero Noyat no hablaba mucho de él, Ni siquiera le había contado nada de su familia. Simplemente no le importó en su momento, sin embargo, Había algo que no le daba buen espina de su pareja y es que este era muy cerrado con sus asuntos personales con el.
Una noche, su pareja salio de casa y se perdió durante mucho tiempo. Tachi estaba nervioso de que alguien más lo Abandonará. Empezó a buscarlo desesperado, sin embargo, no tuvo éxito, acudió a la policia un sin fin de veces, pero nadie lo ayudó porque no habían registros de su pareja en el sistema. Este se fue a casa exhausto por la situación, Noyat era la única persona qué le quedaba en este mundo, a quien podía acudir y abrazar para sentirse seguro.
Pero ahora ya no estaba, todo era un caos en su vida. Trato de seguir adelante sin el, pero cuando tienes a alguien como tú único compañero de vida, es difícil seguir adelante sin el.
Una noche alguien llamó a su puerta, era su novio. Estaba tan feliz de volver a verlo, pero este solo lo miraba con una expresión fría e impaciente, le dijo que tenía que acompañarlo, sin renegar ya que era importante y tenían que llegar a tiempo.
Tachi no entendío nada de lo que su pareja le decía, un mal presentimiento se apoderó de él, pero su novio insistió en que lo acompañará; al final acepto, creyendo que la situación era grabe y su pareja ocupaba de su ayuda en algo muy importante.
Se subió a la moto de su pareja y se fueron del lugar, mientras más se alejaban de la ciudad, casas y colonias, el mal presentimiento de hace unos minutos se volvió a apoderar de él, esta vez más fuerte y escalofriante, no sabía a dónde se dirigían específicamente. Su novio no le dio respuesta alguna y eso era lo que lo aterraba más.
Llegaron a la zona más desolada de la ciudad, era cerca del puerto, Tachi no se contubo más y le pregunto a su pareja que era lo que estaban haciendo ahí.
A lo cual, este simplemente se río de manera maniática e hizo una seña con sus manos; Tachi ya asustado por la situación, le pregunto de nuevo que hacían ahí y que era lo que pasaba, pero unos hombres salieron de la oscuridad y lo agarraron.
Tachi grito del miedo y le pidió ayuda a su pareja, pero conoció ahí mismo quien era su "pareja" realmente.
Al parecer nunca tuvo a nadie a su lado, no tuvo un compañero de vida, una persona que lo amara realmente; Tachi no pudo aguantar el llanto y le pregunto el porqué le hacía esto.
Noyat con su voz fría y cortante; le reveló la verdad: Resulta que el padre de Tachi le debía demasiado dinero a Noyat, y este había firmado un contrato que si no le devolvía el dinero, este tendría que dar algo acambio para que cubriera el dinero que había perdido en prestarle, y a este no le quedo más remedio que darlo a el.
Tachi se sentía traicionado, herido, usado, abandonado. Toda clase de emoción negativa ahora ya hacía en su cuerpo... era de esperarse, nadie nunca lo quiso, y todos a su alrededor lo abandonaron una vez que obtenian algo de el.
Ahora los odiaba con toda su alma, el chico que amaba, fue su peor traidor, el padre por el que algunas veces se preocupo y pensó en cambiar para tener una relación paternal mejor, fue el que lo empujó por el barranco, y su madre, la mujer que quería un poco, por miedo a quedarse sólo, era una Bill zorra.
Se dio cuenta de la manera más cruel, que siempre estuvo solo y que jamás tuvo alguien en quien confiar o contar con su ayuda, el mundo estuvo en su contra desde que nació... no! ¡No era el mundo! Hera la humanidad la que jugaba en su contra, y lo lastimaba una vez que que lo veía salir de las aguas; podía odiarlos con todo su ser en este momento, desear ser el causante de la muerte de cada uno.
Los traficantes se lo llevaron, los días que sufrió ahí fueron su peor infierno, abusos sexuales, golpes, diversión enferma con su cuerpo, contaminaron su cuerpo y alma, y el solo podía llorar por el miedo, el dolor y la agonía. Asta que una noche, su cuerpo no pudo resistirlo más y con las pocas fuerzas que tuvo logró huir de aquel lugar.
Camino descalzo y herido por aquellas zonas boscosas y desoladas; tratando de encontrar un lugar seguro. Ya no quería seguir viviendo así; odiaba a todo el mundo, y quería venganza por todo lo que le hicieron, Tachi se desmayo en el piso por las horas que llevaba huyendo. Su alma estaba contaminada de odio, ya no podía sentir algo más que no fuera odio. Llevo su vista asta donde se encontraba una sombra que lo cubría, frente a el estaba una extraña silueta, cabello negro largo, ojos escarlata penetrantes y una estrella en su frente.
¿Que diablos era esa cosa? ¿Lo mataría? ¿Eso importaba? ¡no! Sin embargo, por más escalofriante qué luciérnagas la criatura, no podía sentir miedo, ya qué el odio era el único que avitaba en su cuerpo, el que dominaba su corazón y su alma.
—¿Quien... eres... y que quieres?
La criatura logró y afilo su mirada hacia el joven.
—¡eres patético!
Fue lo único que le dijo, pero luego se detuvo a pensar y continuo hablando.
—¿de verdad vas a morir así de patético y humillante?
—¿por que no me matas y ya?
—¡porque no vengo a matarte! Quiero negociar contigo.
—¿que quieres específicamente?
—¡te eh obcervado desde que naciste! Padres abusadores, una vida de mierda, un novio que fue quien menos esperarías que te traicionara.
Al mencionarlos, el odio de Tachi creció aun más, ahora que ese demonio le volvía a recordar lo estúpido que fue al creer que alguien lo quiso o se llegó a preocupar por el, fue la gota que derramó el vaso.
¿Quería vengarse?
¡Claro que quería vengarse! 1 × 1 fueron los que hicieron fila para hacer de su vida un mierda.
Era hora de pagarles con la misma moneda y demostrarles que el mal es como un boomeran, que regresará en el momento menos esperado.
Pero todo trato tiene su condiciónes y consecuencias.
La primera, era que perdería su humanidad después de hacer dicho trato, la segunda; fue que estaría en eterna soledad y la tercera, es que su cuerpo ya no le perteneceria una vez que cerraran el trato. Aún con las consecuencias y las condiciones del Nagualt, Tachi acepto rotundamente, tenía razones para odiar a este mundo y era la humanidad, por los traficantes que tocaron su cuerpo, por las personas más cercanas a él que lo apuñalaron por la espalda, por todas las veces que lo hicieron sufrir y lo destruyeron sin límites.
Ahora era su turno de jugar el mismo juego, pero esta vez, el sería el gato y ellos los ratones.
Se encargaría de hacerlos sufrir uno por uno, hasta verlos rogar y retorcerse por piedad, mientras él sonreía disfrutando de la enferma diversión como ellos disfrutaron con él primero.
—¡Acepto!
Dijo para extender su mano a la del Nahual frente suyo. Este sonreía con satisfacción, alfin obtendría un cuerpo después de tanto tiempo.
El Nahual tomo el brazo de Tachi y uso su cuchillo para crear un sello en el.
Minutos después, este había despertado de un largo sueño, se empezó a incorporar, notando de que su cuerpo ya no se sentía igual, tenía una extraña sensación y a la vez una emoción por algo que aun no comprendia, que demonios era lo que le pasó. Pero el odio que guardaba por todos, aun hacía guardado en su pecho.
Escucho una voz detrás suyo; y al mismo tiempo, una voz profunda sonó dentro de su cabeza.
❝Matalos❞
Fueron las órdenes de aquella vos en su cabeza.
Se escondió detrás de unos árboles, esperando el momento adecuado para acabar con su presa. Miró sus manos, donde ya hacía unas garras como las de un tigre. Sonrió por lo visto, ya sabía con que atacar.
El traficante estaba pasando con una pistola en mano, alumbrando su alrededor con una linterna mientras buscaba a Tachi.
El nombrado tomo unas piedras y lo golpeó en la cabeza; el hombre se dio la vuelta para mirar quién fue el responsable de la piedra, pero no pasó ni un segundo cuando este cayó al suelo con la garganta rasguñada y sangrando. De las sombras salió el chico, mirando al hombre que estaba agonizando de dolor.
Los ojos del chico antes de un café oscuro, ahora eran de Esclerotica negra e iris de un rojo escarlata; con su pie descalzo, empezó a aplastar con fuerza la cabeza del hombre, asta dejarla como una calabaza destrozada.
Risas salieron de su boca, volviéndose más maniática con cada carcajada. Aún faltaban más, no se contuvo ni se apiado con ninguno. Los torturó de la misma forma en la que ellos lo torturaron a él, tomó un rifle y lo metío en el recto anal de uno, para luego jalar el gatillo y matarlo, repitió lo mismo con otro, pero esta vez utilizo distintos objetos. Desde ramas con espinas, asta cuchillos delgados y barras de hierro calentadas, para luego matarlos de las maneras más sádicas posibles.
Había perdido la cabeza ¡pero eso importaba ahora! ¡No! Lo que importaba ahora. Era ir tras los principales traidores y los causantes de su infierno.
Llego a la casa que alguna vez compartió con noyat. Examino la casa, pero antes de comenzar con su venganza y poner en pie todo lo planeado, se aseguró primero de que no hubiera forma de que escapara o contactara con la policía, corto los cables de las líneas telefónicas y también corto los cables de energía.
No quería que escapara de lo que le esperaba y que tampoco Nadie se metiera en su camino, porque si lo hacían, también saldrían quemados junto a Noyat.
Al entrará a la casa, noto prendas de ropa esparcida por toda la sala. Habían botellas de cerveza, licor, whisky y bodka tiradas y esparcidos por el piso, ropa interior de mujer, desde calseteros, lencería y condones usados en el piso.
¡Asco! Eso era lo que sintió al ver toda la ecena frente suyo. Este tipo que llego a considerar el amor de su vida, era idéntico a sus padres; de tan solo pensar en todas las veces que lo estuvo esperando en casa hasta tarde, mientras él se divertía con distintas mujeres, le causaba un revuelo en el estómago y un odio profundo, que ardía como las flamas del infierno.
Pero se las estaba apunto de cobrar.
¿Y si rogaba por piedad y compasión?
¡Al diablo con ello! Lo mataría y gozaría de su muerte, fue a la bodega de la casa y sacó de esta la hoz con la que solía trabajar de leñador, se encerró en el cuarto de bodega y empezó a afiliarla, de manera en la que esta pudiera cortar todo con el primer impacto.
Una vez ya lista, se dirigio al cuarto de Noyat, como se lo espera encontrar, estaba acostado en la cama, con una mujer, los dos estaban desnudos y en la cama había rastros de semilla y condones usados, además de la ropa esparcida por todo el cuarto.
❝¡ja! No sabes como voy a gozar de todo esto, maldita Mierda❞
Pensó para pegarse un poca al lado de la figura femenina, posicionando bien su hoz, este tiro de ella hacia atrás y estampó el filo de esta contra el cuerpo de la mujer, una y otra vez, mientras de esta salía gemidos y agudos débiles por la situación, tachi la macheteo 4 veces asta asegurarse de que el cuerpo no se pudiera mover.
Debido al movimiento que estaba provocando despertó a Noyat, que intento prender la luz, pero no había energía, este sintió algo húmedo en su brazo, pero como estaba en oscuras no podía ver precisamente que era, tomó su teléfono y con la pantalla de este alumbró para ver que era lo que pasaba, y cuando vio el cuerpo desmenbrado de su amante, soltó un grito de pavor y se lanzó de la cama arrastrándose hacia atrás mientras miraba el rostro frío y lleno de diversión enfermiza de su ex pareja, la cual creyó que ya estaba muerto.
—¡Hola Noyat!~ ¿me extrañaste?~
El azabache se puso a la altura de su ex pareja, que estaba en el piso temblando de miedo, se puso a su estatura frente a su rostro y le sonrió mostrandole mejor sus ojos penetrantes y sus colmillos espelusnantes. Con esa sonrisa que ya habría matado a medio mundo.
—¡Esta es la parte en donde corres, idiota!
Se levantó de golpe y salió corriendo desnudo, hasta la salida, trato de abrir la puerta pero esta estaba trancada, busco otra salida, llegando a la cocina, la puerta no estaba asegurada, en cuanto tomó la perilla para abrirla una fuerte cuchilla atravesó su abdomen, sus ojos se pusieron en blanco y miraron hacia abajo, observando con horror, espanto y desesperación, la cuchilla que atravesó su cuerpo.
Sus ojos se pusieron en blanco y de un momento a otro, fue jalado asta donde estaba Tachi, quien enterró sus garras en la espalda de Noyat, biendo con satisfacción la samgre qué caía lentamente.
Lo levanto con su mano y luego lo lanzó con todas sus fuerzas a la pared de atrás. Chocó contra la pared sintiendo como algo cortó la parte trasera de su cabeza, haciéndola sangrar y dirigir hacia lo que se supone que golpeó su cabeza, sus ojos se anularon al ver que era una foto de el y tachi en la playa, donde el azabache sonreía con felicidad a la cámara y el miraba hacia otro lado desinteresado.
El azabache le tomo del cuello y notó la foto debajo suyo. Soltó a Noyat y tomo la foto para mirarla mejor, luego miro la foto por unos minutos y luego dirigió su vista asta Noyat qué trataba de recuperar el aliento y poder huir de ahí, Tachi lo jalo del pie y lo mantuvo debajo de su pie, pisando con fuerza su pecho, como si tratara de destruir una calabaza a modo de pisadas.
Le mostró la foto. Noyat trataba de decir algo pero no podía, la mirada del azabache ya lo mataba del miedo y lo pedrifico.
—¿recuerdas cuando me prometiste que sin importar que, estarías conmigo en las buenas y en las malas asta la muerte? ¿Y sabes que por haber rotó tu promesa, tienes y precio que pagar?
Dijo mirándolo desde arriba.
El de abajo retrocedió levantando su brazo en señal de piorrar por piedad.
—¡A..amor! Cálmate ¿si? Yo... te juro que esto no volverá a pasar y....!
Su voz se detuvo al escuchar la risa del azabache.
—¡Claro que no volverá a pasar! ¡porque no pienso dejarte vivó para que vivas lamentandolo!
Tomó la hoz y la estampó contra la cabeza de Noyat. Acabando con su vida.
❝¡Diablos!... que jodida satisfacción❞
¿Y porque para con Noyat cuando le faltaban 2 mas?
Limpio la hoz qué utilizo para matar a Noyat, le faltaban dos personas más por eliminar. Tomó el cuerpo de este y lo enterró en el bosque, no sin antes bañarlo de cemento para que no pidieran conseguir nada de el.
Se fue a casa de su madre, era la que más quería eliminar ahora.
Ahí la vio, divirtiéndose con su amante; mientras este le tocaba las piernas y se reían Sosteniendo unas copas de champán en las manos; su pareja dejo la copa a un la do y se puso sobre ella, besándola y deshaciendose de la ropa. Aprovecho ese momento para colarse en la sala, los 2 adultos estaban más sumergidos en los guemidos de ambos que no se percataron de la precencia del azabache.
La madre de Tachi se había quitado la ropa, quedando solamente ropa interior. Su pareja la besaba salvajemete, asta que su cabeza se habrio y una cantidad grotesca de sangre la empapó.
Completamente desalineada y sobre expresiva, miró el cuerpo sin vida de su pareja, sus ojos se dirigieron asta arriba encontrándose con los orbes oscuros y penetrantes de Tachi.
Un grito de pavor salió de su boca, trato de huir, pero Tachi fue más rápido, con la Hoz de su mano, la arrojo en la pierna de su madre, La extremidad fue separada de el cuerpo con el impacto de la Hoz resien cubierta de sangre.
La mujer soltó un grito de dolor, sin una pierna se fue arrastrando asta la salida, pero su espalda fue apuñalada.
Gateando asta la salida, trato desesperada de intentar huir, El brazo con el que trataba de abrir la puerta se le fue cortado, otro grito salió de su boca, callo al piso quedando estampada contra la pared, sus lágrimas salía con desesperación. Sus Intentos de huir fueron inútiles.
Miro a Tachi, e inmediatamente empezó a rogar por piedad.
El azabache la miraba como si fuera una bacteria y una sonrisa fría se formó en sus labios, la jalo del pelo y se la llevó a rastras del lugar, mientras ella gritaba y rogaba por que el la dejara ir.
Faltaba una persona más por cazar. Miró la casa frente suyo, la mujer que había traído con el, estaba amordazada y atada a un arbol para que no pudiera huir.
Entro a la casa, vio como su padre estaba bebiendo, este se había quedado dormido, tachi lo cargo y se lo llevo junto a su madre, aun lugar donde el juego empezaría.
Lo despertó de un golpe. El padre despertó aún con la resaca; pero al ver la situación en la que estaba, sintió como el pánico se apoderó de su cuerpo.
Obcervo. Su hijo, que sonreía desde la puerta del lugar donde estaban.
—ni te esfuerces en gritar... toda la maldita zona está deshabitada.
Le regalo una sonrisa retorcida mientras se hacercaba lentamente.
—El imbécil de Noyat ya me lo contó todo~ y claro ¡Ya me hice responsable de el! Ahora me toca deshacerme de ustedes dos, pero antes de hacerlo. Quiero hacerles sentir todo el infierno que me an hecho pasar desde que nací.
El azabache arrastro una mesa llena de objetos de tortura. Estuvo escogiendo con cual empezar y vio unas tenazas de metal, las tomó y se dirigio a la hornilla de carbón que estaba alumbrando el ligar, sacó un carbón caliente, que brillaba con intensidad por el fuego, se hacerco a su padre y este le mostró el caballo ardiente.
—¿recuerdas cuando me apagaste un sigarro ensendido en el brazo?
El apadre de Tachi soltó un grito ahogado al sentir el pedazo de carbon hacer contacto con su piel, mientras Tachi lo presionaba con fuerza y lo enterraba en su brazo.
Ahora era el turno de su madre.
—¿te acuerdas cuando me rompiste una botella en la espalda?
El azabache, sacó una tabla con vidrios rotos pegados y se la pego en la espalda a su madre, mientras que usaba un martillo, y le pegaba una y otra vez a la tabla qué tenía su madre atrás.
Se la paso torturandolos desde la noche a la mañana, gozando las súplicas de sus padres. Le gustaba lo que veía frente a el, Ver los agonizar del dolor y rogar porque los perdonara y los dejara ir. Al final ambos padres murieron lentamente, fue de las muertes más dolorosas y de las más satisfactorias para el azabache.
Cómo tenía planeado, borro la ecena del crimen, Limpiando hasta el más pequeño rincón de donde los había torturado.
Ya no tenía nada que hacer.
Miró sus manos un momento y se dio cuenta que este mundo necesitaba arreglos, hay tantas plagas que tenía que eliminar, y esa era una tarea perfecta para el.
Tomó sus armas y se fue de aquel lugar, se dice asta ahora por los mismos pueblerinos de algunos pueblos desolados, que a medida de las 12 de la noche se siguen escuchando los gritos de sus víctimas y las risas que el surge por su diversión al torturarlos.
Nadie sabe asta ahora y con exactitud que fue lo que creó a ese demonio. Pero algo si es seguro, nadie se a podido salvar de él.
Así que ten mucho cuidado, porque si te obcerva. Tu podrías llegar a ser la siguiente presa de Tachi the Nagualt.