Wiki Creepypasta
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"Buenos días queridos alumnos, como siempre, hoy estoy nuevamente agradecido de poder contar con ustedes para una clase en la que nuestras mentes se llenarán de conocimiento y optimismo. Antes de empezar, como es habitual, un escrito reflectivo para que el desahogo nos satisfaga. El título de hoy, Rostros Reconocibles."

  • Inicio

A qué punto hemos llegado esta civilización, hasta qué punto de la locura que... hoy no podemos a veces reconocernos, y mañana tal vez por fin sea el último día que nos quede en la vida.

El planeta tierra envenenado nos abre las puertas y no nos garantiza salvación. Dejamos atrás tiempos pasados en los que las cosas estaban mejor, pero que poco a poco inevitablemente los tiempos de depresión han llegado, pues en lugar de progreso, el retroceso por el odio y desigualdad y avaricia nos mantiene atados a la condena.

Que los cuerpos carbonizados e irreconocibles que muestran tanto dolor de aquellos quienes fueron víctimas terminales de las bombas, no sean más desagradables que los cuerpos modificados genéticamente generación por generación que ahora no son iguales a lo que se suponía que estaba escrito, a causa de la radiación de la muerte.

Es irónico y desafortunado a la vez, que justamente quienes más estamos contribuyendo al asesinato del hogar, seamos quienes más soportamos y perduramos en el tiempo, demás "inferiores" animales desaparecen a velocidades inesperadas y la vegetación no es que sea ya un sueño, solo que se ha dañado irremediablemente. Todo lo que veo es veneno para mí, incluso tú, incluso los seres queridos... incluso yo. No hablo metafóricamente, es la verdad, porque hemos llegado a un estado tan puro de mortalidad, que nada en absoluto es totalmente seguro. Nada.

Deja que los estallidos retumben en tus oidos o que te dejen sordo, no es diferente cuando sientes la naturaleza temblar, el aire quemar tu piel y ver las nubes agrandarse siempre y nunca disiparse. Puedes ser tú quien mañana hayas sido elegido o elegida para servir a los autores de la masacre, así que tú decides si los sigues, o acabas con tu existencia con tal de no ser parte de este malévolo plan.

Rostros reconocibles

No tengas miedo cuando los rostros reconocibles finalmente se avecinen. Esos rostros tales proyecciones de los anteriormente fallecidos están tan enojados y entristecidos como nosotros los espectadores de la pesadilla. Así que esos rostros saben quienes son culpables y quienes no. Cuando ellos aparezcan desde lo alto de los cielos materializados en las enormes nubes con las que se les conocen, sal de tu casa y miralos con atención con mirada bien alta. Esas nubes de humo infinitamente más tóxicas que las nubes de las explosiones correrán ávidamente a través del mundo para impregnar los cuerpos de los vivos.

A ti los rostros reconocibles te tocarán, tocarán tu superficie llena de masas de piel no correspondida, tus bultos oseos, capilares y organicos desproporcionados. Tus malformaciones cancerigenas. No te preocupes porque a ti no te pasara nada.

A los culpables de la catastrofe, de la guerra, a ellos los rostros reconocibles los tocarán, tocarán sus preservados cuerpos de salud y fuerza, alimentación y belleza. Ellos son los que temen porque a ellos si les pasará lo peor. La muerte, pero no antes sin un sufrimiento no solo mental sino también físico, un dolor inenarrable.

  • Fin

Aplausos de alegría y entusiasmo resuenan en el aula. Los pequeños finalmente sonríen, y eso es un alivio cuando siempre hay caras largas... metaforicamente y literalmente también.

-Bueno, ya que hemos dado una breve introducción, a comenzar con la clas...- Dice el profesor mientras saca sus libros y entonces es interrumpido.

-Profesor, mire eso en el cielo, ¿qué es eso tan feo?- Gritan los niños asombrados y algo asustados mientras se arremolinan en las ventanas mirando hacía el exterior.

El profesor sorprendido se queda en silencio y se dirige lentamente a la ventana, y entonces en el cielo visualiza atonito un evento que solo ocurre milagrosamente, a veces incluso con hasta décadas de diferencia, nubes enormes, mucho más masivas que las nubes de las bombas y con expresiones de vida humana y de otras índoles que reflejan un enojo muy grande. Nubes que caen a las calles ferozmente. Y mientras los niños están asustados, el profesor sonrie de una forma tan alegre y reluciente, que da miedo.

-Qué son esas nubes profesor?- Pregunta una alumna.

-Tranquila, son solo los rostros reconocibles. Aquellos rostros de todos y cada uno de los inocentes que han muerto por la eterna guerra nuclear- Responde el profesor.


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