Wiki Creepypasta

Una eternidad estuve esperando este momento y no me dejaré sumergir en temor y miedo.

Siempre quise tomármelo con calma pero ya me cansé de tanto esperar al momento en que confíes en mí; ya te he ayudado, como cuando necesitabas una mano en la biblioteca buscando ese libro de Coelho; te he hablado y aún así, no me das interés. Tal vez el único modo en que pueda conseguirte es consumiendo tu carne, porque eres un gourmet que huele eternamente bien, eso me desespera mucho y deja sin respiro al caníbal que hay en mí.

Este último tiempo pensé en todo lo que te haría luego de manosearte intensamente.

Me llenaré los bolsillos de tus vísceras, eso no lo dudaré. También me comeré tu cerebro con delicadeza, mientras bebo el jugo de tu corazón una y otra vez.  Además me tomaré el tiempo necesario para desmenuzarte lentamente, consumiendo toda tu jugosa carne, lo disfrutaré, tal vez pare un poco; hasta que te muevas lento y te quedes eternamente sin aliento luego de arrancarte tus cuerdas vocales. Arrancar tus extermidades y cortar tu carne para consumirla. Luego prenderé fuego cualquier evidencia, como si un pequeño escape accidente haya quemado toda tu casa. Debes recordar que el dolor es mi jalea real, mientras más sufras, más feliz me harás.

Ahora mismo estoy preparando todo para probar mi banquete, los cuchillos, el encendedor, la gasolina y todo lo que necesitaré para disfrutar todo tu delicioso cuerpo.

Estoy subiendo a mi asqueroso auto lleno de los restos de mi comida, pero ese olor que sale de esa chatarra me excita mucho, dándome ganas de tocarme rápidamente antes de subir. 

Luego de acabar con ese asunto, me empiezo a dirigir a tu casa. Se me hacía agua la boca solo de pensar en todo lo que te haría. Tan solo imaginarlo, me daba una enorme erección.

Veo tu casa, acogedora y linda, toco tu asombroso timbre con una deliciosa melodía como tú. Abres la puerta, y te veo, una figura hermosa como lo recordaba en el maravilloso instante en que te conocí ayer en esa librería. Te pedí permiso de pasar a tu hogar y tú con una extraña mirada me hiciste pasar, luego me preguntaste con tu linda sonrisa y con mucha amabilidad qué venía a hacer aquí. Yo en vez de responderte, no lo pensé ni un segundo y me abalancé rápidamente hacia ti, clavándote el largo y filoso cuchillo en cada una de tus extermidades, y mientras gemías del dolor empecé a desnudarte lentamente… 


Creado por: Majin Tinieblas Las Tinieblas nos rodean...