Wiki Creepypasta
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En cualquier ciudad, en cualquier país, encontrarás un área que esté en decadencia, pero aún inhabitada. Éstas áreas tienen muchos nombres: distritos pobres, ghettos, barrios marginales, etc. Busca el más cercano a donde vivas y dirígete hacia allá. Busca en el lugar hasta que encuentres un edificio de por lo menos dos pisos con más de una pared derribada. Asegúrate de no llevar nada de valor contigo, salvo algunas monedas. Entra al edificio al mediodía a través del agujero de la pared, o deberás entrar por la puerta.

Dentro, en el piso superior, encontrarás una habitación con un hombre andrajoso y maloliente mirando hacia la ventana. Acércate silenciosamente y susúrrale al oído:

“Estoy aquí para ver a El Holder de la Pobreza“.

Barrendero de las calles, desaseado, Andrajoso y mugroso! -mendigo

Si no se mueve durante cinco segundos, da la vuelta y corre fuera del edificio, tan lejos de ese lugar como te sea posible. No mires hacia atrás hasta que estés lejos de la vista del edificio más próximo en la zona. Nunca regreses.

Si levanta su mano derecha, quédate en la habitación hasta la noche. Cuando anochezca, te mirará a la cara. Verás que su cara ha sido horriblemente quemada y que es difícil mantener la vista concentrada en él. No importa de qué forma, no dejes de mirarlo o retrocedas ante su apariencia. Luego de un momento, abrirá su boca y dirá algo que sonará como una confusión sin sentido, luego mirará la ventana otra vez.

Mira a través de la ventana y podrás ver la vida de aquel hombre. Verás cómo perdió su dinero, cómo su familia cayó en la miseria, cómo su rostro se quemó, y todas las penalidades a las que se vio obligado a someterse para sobrevivir hasta este punto. No muestres ninguna señal para simpatizar con él. Él no necesita ni pide tu piedad.

Cuando haya finalizado, muéstrale alguna forma de reconocimiento al hombre. Él sonreirá y sostendrá una pequeña y asimétrica taza de lata. Saca las monedas que llevabas y déjalas sobre su taza. Darle una cantidad inapropiada (o guardarte parte de las monedas) provocará que el sujeto se hunda en un estado de desesperación, y no importa cuanto tiempo pierdas para tranquilizarlo, no serás capaz de levantarlo de su profunda tristeza.

Si hiciste bien, el hombre cerrará sus ojos y se dormirá. La taza permanecerá en su mano, y las monedas que le dejaste ya no estarán allí. Recoge su taza, pero no lo despiertes.

Taza

Esta taza de lata es el Objeto 216 de 538. La más profunda misera emergerá si permites que se reúnan todos.

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