El túnel de Sensabaugh en Tennessee es conocido por los lugareños como un lugar maligno que debe evitarse a toda costa. Se dice que fue sitio de varios asesinatos, personas creen haber oído gritos, pisadas, y llantos de bebé. Si quien conduce por el túnel apaga el motor de su coche dentro de él, el vehículo no vuelve a encenderse. Personas han visto espectros en sus espejos retrovisores acercándose a sus vehículos y extrañas luces hacia ellos a lo largo del túnel. Algunos incluso han dicho que después de conducir fuera del túnel hallaron huellas del tamaño de una mano de bebé a lo largo de los costados de sus coches.
Mucho se ha dicho sobre este lugar, muchas son las leyendas y mucho el temor que ha logrado generar en las poblaciones a su alrededor e incluso propagarse hacia horizontes mucho más lejanos.
Un día decidí atravesarlo con mi coche, siempre sentí curiosidad por él y saber qué se siente transitarlo. Siempre fui bastante escéptico acerca de cosas de esta naturaleza, pero por alguna razón sentía que deseaba vivir la experiencia de introducirme en las sombrías leyendas del túnel de Sensabaugh. No sentía miedo, sólo curiosidad.
Cuando estuve frente al túnel detuve el auto, me bajé de él y caminé unos pasos hasta la entrada. Allí me quedé parado observando su interior. Tenía un aspecto por mucho lúgubre, viejo, abandonado, sus paredes estampadas de grafitis de todo tipo, un frío escalofriante emanaba de su interior. Podía ver su otro extremo con claridad, no era muy extenso, un arroyo de aguas claras lo surcaba en toda su longitud. Tomé una roca del suelo y la arrojé al interior, el sonido del impacto contra el piso cubierto de agua creó un eco que atravesó el túnel de lado a lado hasta escaparse por sus aperturas. Aunque no me parecía sobrenaturalmente espantoso, no podía negar que me producía cierta inquietud su aspecto demacrado contrastado con las muchas leyendas que entramaban su historia.
Fue entonces cuando decidí que dejaría el auto en donde estaba y lo recorrería caminando. Al cabo de tres pasos en dirección hacia el túnel, me llevé un espanto cuando repentinamente se posó un cuervo graznando violentamente encima de la entrada. Lo miré maldiciéndolo por el susto y en un ademán agresivo con las manos, lo espanté al instante. Éramos nuevamente el túnel y yo, aunque el graznido del cuervo parecía seguir resonando en un eco lejano dentro del lugar que llegaba tétrico y vago a mis oídos.
Caminé lentamente por el centro del túnel, el agua fría del arroyo mojaba mis zapatillas, cada paso en el agua resonaba increíblemente claro en el ambiente vacío del lugar, aunque los sonidos externos parecían no penetrar en el túnel una vez dentro, el cantar de los pájaros y los ruidos de la naturaleza no existían allí, como si mágicamente te transportara a otra dimensión. El mundo desaparecía entre aquellas paredes, el universo entero parecía reducirse a aquel pasaje.
Todo me resultaba normal allí dentro, al comienzo nada me daba sensación de extrañeza más allá del aspecto tenebroso propio del lugar. Llegando a la mitad del recorrido, comencé a sentir la extraña sensación de que algo me acechaba. Me detuve, miré hacia atrás y nada. Pero cuando volteé la mirada nuevamente hacia adelante, me di cuenta que efectivamente no me encontraba en un lugar normal, ya no vislumbraba el final del túnel, era tan extenso que parecía llegar a la mismísima eternidad, volteé nuevamente y tampoco pude ver la entrada, sólo un horizonte oscuro entre paredes viejas sin final. ¿Dónde estaba? ¿Qué sucedía? Eran algunas de las preguntas que mi mente alterada comenzaba a hacerse ante la desesperación de lo inexplicable. De pronto la oscuridad, estaba perdido en medio de la negrura absoluta sin saber qué hacer ni a dónde ir, petrificado y horrorizado, sabía que moriría allí, solo.
No pasó mucho tiempo cuando sentí a los lejos pisadas que resonaban en el agua, las primeras fueron adelante, luego las oí por detrás, estas últimas eran presurosas como si alguien corriera hacia mí. Pregunté quién andaba allí sin obtener respuesta alguna, sólo una risa mezclada con un llanto apenas perceptible. Llanto que no tardó en intensificarse y retumbar en la extensión infinita de la oscuridad, podía escucharse con claridad el llanto de un bebé, que poco a poco se hacía más fuerte y cercano. Estaba invadido por un miedo que jamás pensé que sentiría. Luego, sentí el ruido de las pisadas en el agua cruzar a mi lado muy rápido, seguido del grito de una mujer como estruendo en mi oído, casi a mi lado. No tardó oírse otros gritos desgarradores a los lejos y finalmente, luego de sentir nuevamente algo correr hacia mí, un empujón que hizo que mi cuerpo se desplomara sobre el agua fría. Luego, silencio sepulcral. Sólo el sonido del crujir de mis dientes que temblaban del horror. Allí me quedé tirado unos minutos sin moverme tratando de comprender qué era todo eso, e intentando auto convencerme de que en cualquier momento despertaría en mi cama de una espantoso sueño. Sentí entonces una mano pequeña tomar mi brazo, junto con lo que parecía el balbuceo de un niñito, segundos después, un llanto de bebé espantoso, tan desgarrador y potente que no parecía humano, y lo que en principio era una manito sobre mi brazo, ahora eran garras desgarrando mi carne. Grité, grité y lloré tan fuerte como pude sobrepasando ya cualquier tipo de locura. Por doquier, llegaban a mí sonidos de todo tipo y de todas las direcciones, risas, llantos, gritos y otros irreconocibles. Fue entonces cuando perdí conciencia de lo que pasaba.
Desperté en el hospital de Memphis luego de un coma de quince días. Los médicos y amigos me contaron que me hallaron inconsciente a un kilómetro de mi automóvil que se encontraba frente al túnel de Sensabaugh. Tenía varias heridas en todo el cuerpo y profundas desgarraduras en los brazos, lo cual atribuyeron al ataque de algún animal salvaje. En su momento no conté lo ocurrido, pues no estuve preparado para recordar la experiencia que tuve en el túnel sino hasta dos años después de lo ocurrido aquella tarde.
Me juré jamás pisar los alrededores de ese lugar nunca más. Desde entonces entendí que hay realidades inexplicables que rondan este mundo, pero por sobre entendí que jamás, queridos lectores, deben tentar a lo que no están preparados para ver.
NevermorE88 (discusión) 02:57 5 may 2015 (UTC)