Esto pasó en la ciudad de Rosario, Argentina, en el año de 1989 y no es una leyenda, es algo que pasó de verdad. Cuando tenía diez años, mi mamá compró una casa a pocas cuadras de donde vivíamos, con mi hermana a veces íbamos a jugar a esta nueva casa. Subíamos a la terraza, jugábamos en el fondo que daba a una casa vecina y en esta a veces veíamos a una pareja de ancianos. Él era canoso, medio gordo, siempre con una musculosa blanca y tomando mate debajo de un árbol, la señora tenía el pelo teñido decolorado, con permanente, era bajita y estaba sentada a su lado. Nunca los saludamos porque no los conocíamos.
Transcurrido un tiempo, casi un año, mi mamá nos comenta a mí y a mi hermana que iba a comprar la casa del fondo, mi hermana y yo nos miramos y respondimos inmediatamente: ¿qué casa?, ¿la de los viejitos?, ¿qué viejitos? dijo mi mamá, la de los viejitos que viven en el fondo le respondimos. Mi mamá con asombro dice: no puede ser, porque esa casa está deshabitada, y los viejitos murieron hace 15 años. Dudando nos preguntó cómo eran y nosotros se los describimos tal cual lo expliqué antes, mi mamá no lo podía creer, ya que nosotros no los podíamos haber conocido y sin embargo podíamos describirlos tal cual. En fin, yo tampoco lo podía creer.
Resulta que esta pareja vivió en esa casa, nos contó mi mamá, que ella sí los conocía de vista. Esta gente murió en esa casa, primero el viejo y luego la señora, tenían dos hijas, y una de ellas vivió un corto tiempo luego de la muerte de sus padres y realizaba espiritismo como Umbanda o Macumba, algo de eso. Mi mamá efectivamente compró la casa y puso un estudio jurídico, en la oficina donde habían fallecido estas personas se percibía un olor feo, la habitación se revisó, se sacó el aire-acondicionado y nada, nunca se supo de donde provenía, el timbre más de una vez sonó solo, se escuchaban pasos. La casa se hizo curar en más de una ocasión por un cura, por curanderos etc.
Hoy tengo 25 años y aparentemente ya no pasa más, pero cada vez que entro a la casa no puedo dejar de pensar en lo que pasó y me incomoda muchísimo estar ahí. Curiosamente hace poco nos enteramos que la hija de estas personas, la que hacía espiritismo, murió quemada en su departamento que se incendió, no se sabe por qué.