
Estas en un callejón, tirado en el piso con tu sangre saliendo de ti y a la vez un líquido verde entra en ti, te levantas oliendo a mierda y caminas mientras las moscas te están comiendo, la gente a tu alrededor se asusta y empiezan a correr mientras te acercas a un hombre vagabundo, lo muerdes porqué tienes hambre y él te golpea la cara corriendo hacia otro callejón, se queda ahí y muere, luego se levanta con una piel oliendo tú mismo aroma y se repite lo que hiciste, continua una, y otra, y otra vez hasta que no queda nadie, nadie vivo en el mundo y solo por un mordisco, por tu mordisco.