Wiki Creepypasta
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El primer día que vi al perro, que parecía similar a todos los otros que vagaban en mi calle, me dio compasión, sucio, la sarna sobre su cuerpo, y sin collar. No pude determinar quién era el propietario.

Pasaron semanas para volverlo a ver. Me levanté de mi cama una mañana

Red Rover picture

y oí un débil gemido. Miré por la ventana: ese perro carente de ojos.

La sangre empapaba su pelaje sarnoso. Se me quedó mirando durante mucho tiempo. Sentí una oleada de sentimientos opuestos y conflictivos. Su mandíbula cayó desencajada, y me dio la espalda.

No era algo que yo quería volver a ver. De alguna manera yo sabía que quería mi alma.

Entré en contacto con el control de animales y describí el perro, con ganas de sacarlo de mi patio. El operador en el teléfono sonaba perturbado. Me pidió que no llamase de nuevo.

Los cadáveres de los animales comenzaron a aparecer, las mascotas de algunos de mis vecinos, incluyendo gatos y un gran mastín. Todos ellos de alguna manera amanecían frente a mi puerta.

No queriendo ser acusado de asesino, me deshice de los cuerpos. Pero esta no era ninguna masacre animal corriente: sabía que el perro era el culpable.

Días más tarde, escuché un ruido anillo en la noche, seguido de un portazo. Cogí mi teléfono para proporcionarme algún tipo de luz. Nada. Sentí una presencia en mi casa, así que me levanté de la cama.

Un rastro de sangre, casi como si algo había sido arrastrado a través de mi piso. Lo seguí y la sangre me llevó a una puerta abierta, la de la bodega. Mientras descendía los escalones oscuros, sabía que algo andaba mal. Podía oír débilmente el zumbido de las moscas acumulándose en torno a una víctima desconocida. Llegué a la parte inferior de la escalera y prendí las luces.

Vi un cadáver humano roído por lo que parecían las fauces de un perro. Junto con los otros animales muertos, esta persona tenía la misma marca inquietante: los ojos de la persona arrancados de sus órbitas. Estaba claro que el perro le había mordido en la yugular

En la cabeza de la víctima descubrí las huellas de garras: "Red Rover".

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