Un momento, ¿Qué?

Me encontraba en el cementerio, era de día, y me posaba en silencio en frente de su lápida. Su muerte aún me perseguía.

En el momento en el que me iría, oí algo tras de mí, era ella saliendo, venía por mí y ahora yo me encontraba corriendo, escapando de su cadáver. Estuve en la ciudad corriendo, en el metro, en el centro comercial, en todas partes, pero ella no me dejaba de seguir y cada vez estaba más cerca.

Es entonces cuando llegué y me encerré en mi departamento, le grité que me dejara en paz, y cuando parecía que todo había terminado, sentí una mano muy fría apretandome el hombro.

Grité fuertemente mientras abria mis ojos y me sentaba en la colcha de la cama, sudando y jadeando. Mi esposa me dijo que me calmara y que tomara un poco de agua, mientras me acariciaba la espalda un poco dormida.

Así lo hice, me disculpé por despertarla y me levanté, me dirigí hacía la cocina y me serví un poco de agua, respirando profundamente y secando mi sudor.

Mientras bebía, recordaba el sueño que acababa de tener, y en esto, me dí cuenta de algo:

-Un momento, ¿Qué?, la que me perseguía en ese sueño, era mi esposa -

En ese momento miré hacía el fondo del pasillo, en la entrada de mi habitación.